Soy usuario de los mini ordenadores Raspberry Pi desde la versión inicial hace ya algunos años y siempre me han parecido unas máquinas fantásticas. Esta vez quería esperar un poco antes de la compra del nuevo modelo, pues había leído comentarios negativos acerca del calentamiento que sufre el hardware, pero me pareció buena idea comprar la máquina antes del Brexit y tampoco es nada que no se solucione con la refrigeración adecuada.

En su momento, cuando anunciaron el proyecto de kickstarter, financié la iniciativa de la consola Gameshell, anunciada como ‘consola de juegos modular portátil’. De aspecto similar a las clásicas Gameboy y también conocida como ClockworkPi, me pareció una idea muy interesante.

Hace unos meses compré de segunda mano en ebay un ordenador de bolsillo de los años 90. Se trata del SHARP PC-850VS y es una máquina vintage bastante interesente.

Hace un tiempo compré una placa ZX-GO+ montada en la carcasa original de un Spectrum+. EL ZX-GO+ (variante del ZX-UNO) es un hardware moderno que emula ordenadores clásicos: además del Sinclair Spectrum es posible emular otras plataformas como Commodore, Amstrad y otros, todo desde el mismo hardware y usando tarjetas SD como medio de almacenamiento.